El turismo es una pieza clave en el PIB de cada vez más países y por ello, en los últimos años, se están haciendo importantes avances para invertir en marketing de destinos. Más allá de intentar captar un mayor número de visitantes y generar con ello más pernoctaciones y gastos en el destino, los gestores de los territorios están invirtiendo en restauración de patrimonio, en potenciar la creación de empresas turísticas y en colaborar con estos empresarios para hacer que el turista disfrute de una mejor experiencia.

Pero, ¿qué papel juega el turismo de negocios en este dibujo sectorial? Para el secretario general de la OMT, Taleb Rifai, su rol es clave: "Además de generar en promedio un mayor nivel de gasto, reduce la estacionalidad, contribuye a la regeneración de los destinos, promueve la divulgación de conocimiento y potencia la innovación y la creatividad”. Rifai pone en valor que la industria de reuniones en todo el mundo se ha posicionado en el núcleo del turismo como uno de los principales motores de desarrollo del sector y como generador de ingresos, empleo e inversión.

En este sentido, destaca las importantes oportunidades de negocio que reporta esta industria para los territorios y los enormes beneficios que supone para la economía en general.

Y es que las actividades de la industria de reuniones cobran una importancia cada vez mayor para el crecimiento de la economía mundial, como parte esencial de la difusión de conocimientos y prácticas profesionales, así como factor clave para mejorar el entendimiento y relaciones entre distintas regiones y culturas.

"Los viajes y el turismo ya no son sólo una cuestión de producto sino que es una compilación de elementos que constituyen una experiencia turística para el viajero", explica el secretario general.

El turismo de negocios por tanto no debe ser clasificado como un tipo único de turismo, sino como una interconexión de ellos que ofrece a los viajeros nuevos formatos y conceptos , ofreciendo un valor añadido a sus reuniones de negocios.

 

Impacto económico

El turismo de negocio se convierte  en uno de los principales motores de desarrollo de los destinos turísticos y, por lo tanto, una fuente importante de ingresos, empleo e inversiones extranjeras.

Por ello, no se debe aislar esta modalidad turística del país donde se desarrolla,  sobre todo por el gasto que conlleva: los gastos de los participantes y sus acompañantes, los gastos de los expositores, así como los costos de la organización del acto.

Un ejemplo de ello sería la Feria de Madrid-Ifema que en el año 2014 celebrará más de 75 ferias y congresos internacionales, y más de 500 eventos empresariales, que congregarán en Madrid a más de 32.000 empresas de diversos sectores económicos y a 2,8 millones de visitantes.

Un movimiento que aportará un impacto económico a la región de 2.000 millones de euros y que ha contribuido a situar a Madrid en la cuarta posición mundial dentro del ranking de ciudades congresuales.

Claves para los territorios: prestigio de marca

Lo que está claro es que existe una profunda interrelación entre la marca y el turismo de negocios. Barcelona es, tras Viena y París, el principal destino congresual del mundo. Fira de Barcelona contribuye de manera importante al posicionamiento internacional de la ciudad con salones y eventos como Mobile WorldCongress, Barcelona Mobile World Capital, EIBTM, Carbon Expo, Smart City, Alimentaria, Piscina, Expoquimia, por citar unos cuantos, o grandes congresos médicos y tecnológicos que sólo en 2013 han reunido a más de 60.000 delegados.

El prestigio de la marca genera un “efecto llamada”, que a la vez obliga a satisfacer las expectativas de unos visitantes que no son meros turistas. Ferias y congresos interactúan y crean sinergias con las organizaciones y empresas del país.

La ciudad condal ha puesto en marcha iniciativas como Barcelona Growth Network,  impulsada por el Ayuntamiento de la ciudad y ACC1Ó para promover contactos internacionales; campañas de promoción turística y económica. También desarrolla acciones para el impulso y protección de la marca a través del Consejo Promotor de la Marca Barcelona en el que participan las organizaciones empresariales…el prestigio debe mantenerse.

Colaboración entre ciudades: el caso de  Viena y Barcelona

El informe de la OMT se centra en ofrecer claves de posicionamiento para los destinos interesados en trabajar el turismo de negocios. Para ello, plantea una serie de casos concretos en los que las estrategias seguidas han resultado exitosas para esta actividad. La colaboración entre ciudades es una de ellas. Y, como ejemplo, encontramos a Barcelona y Viena, que  han conseguido un notable posicionamiento en Estados Unidos y ahora esperan alcanzarlo también en Asia. En 2007, ambas ciudades participaron en la feria CIBTM en China con un programa para la promoción conjunta de ambos destinos y compartieron el mismo stand. Pretendían así ahorrar costes y tiempo para los consumidores.

Ante el éxito de la experiencia, decidieron intensificar aquella forma de cooperación. Ambas han ampliado su compromiso para dirigirse a las asociaciones profesionales. Una estrategia que les es favorable atendiendo a las nuevas tendencias que indican que, en el ámbito de los colectivos médicos más destacados de Europa, se reduce el número de lugares donde organizan congresos.  Esta interesante iniciativa se cristalizó, hace escasos meses, en el anuncio de la Sociedad Europea de Gastroenterología, que hizo público el nombre de las sedes para el encuentro anual de sus especialistas hasta 2019.

La candidatura conjunta de Barcelona y Viena, bajo la batuta de los Conventions Bureau correspondientes, alcanzó  el éxito esperado: albergarían el congreso anual de la United European Gastroenterology (UEG Week), que reúne cada año a cerca de 14.000 participantes de hasta 120 países distintos en un congreso de cinco días de duración. La UEG Week genera cada año unas 50.000 pernoctaciones en la ciudad elegida, en hoteles de todas las categorías.

"Nuestra decisión de limitarnos a sólo dos ciudades para celebrar nuestro congreso —comenta la directora ejecutiva de la United European Gastroenterology, Doris Möstl— responde a una nueva estrategia: queremos reducir el futuro esfuerzo logístico de buscar y seleccionar destinos, para que nuestros recursos puedan concentrarse en los contenidos cualitativos del congreso y en nuevas formas de transmisión de conocimientos. La calidad profesional de las ofertas, tanto en Barcelona como en Viena, la larga experiencia de ambas ciudades y centros de congresos, el Austria Center Vienna y la Fira de Barcelona, así como su excelente reputación internacional, han sido decisivas para poder tomar esta decisión".

"Esta decisión de la Sociedad Europea de Gastroenterología nos supone una especial alegría, pues no sólo permite la celebración de un congreso de fama mundial en nuestras dos ciudades, sino que confirma una vez más la eficiencia de nuestros muchos años de cooperación en marketing y de los resultados comerciales sostenibles alcanzados", señala el director del Vienna Convention Bureau del Wien Tourismus, Christian Mutschlechner. 

Por su parte, el director del Barcelona Convention Bureau de Turisme de Barcelona, Christoph Tessmar, comenta que "en el entorno de conferencias y congresos, la colaboración entre nuestras dos ciudades ha sido hasta ahora única en el mundo en el segmento de los congresos  y ha disfrutado desde su principio de una experiencia altamente positiva. Con ella hemos logrado muchos efectos sinergéticos, aunque el hecho de que ambas ciudades obtengan al mismo tiempo la nominación de sede resulta una interesante novedad. El hecho de haber presentado como un equipo conjuntado supone una ventaja competitiva que deseamos aprovechar al máximo para las dos ciudades". 

Sumar esfuerzos, de nuevo, supone una garantía de éxito.